domingo, 19 de abril de 2009

Acto de magia


Damas y caballeros, niños y niñas, les presento a uno de los magos más aclamados de todos los tiempos, que realiza un truco inigualable, totalmente fuera de este mundo, un acto de desaparición nunca antes visto. Coooooon ustedes, el mago Taaaaaaabini!!!!!!!

—Mami, ¿el mago puede desaparecer a una persona?
—No hijita, es sólo un truco, aunque a veces la gente desaparece de verdad.
—Como el niño Goyito ¿no? El sí hacía magia mami, ¿te acuerdas cómo llenaba la piscina?
—Sí hija, pero ese también era un truco.
—¿Si? —dijo, abriendo mucho los ojos— ¿y cómo lo hacía?
—Es que yo era su asistente pues, cuando tú te distraías, yo echaba un balde de agua a la piscina para hacerte creer que Goyito tenía poderes mágicos.
—Aaaa, dijo con carita de decepción.
—Perdona por mentirte, era solo un juego.
—¿Y a dónde se fue el niño Goyito mami?
—De viaje.
—Se tuvo que ir o se quiso ir.
—Se tuvo que ir, por trabajo. Pero me llamó especialmente para decirme que te quiere mucho, que te manda un beso y que le dio mucha pena no poder despedirse de ti (le sigo mintiendo).

Ya ven amigos, esto es insólito, nadie lo puede creer, adónde se fue el valiente voluntario. ¿A la luna? ¿Al espacio sideral?

—¡A Argentina!, gritó mi hija (no sé por qué está obsesionada con el país gaucho). El niño Goyito está en Argentina ¿no mamá?
—Sí, y se va a quedar ahí por muuuuucho tiempo.

De regreso a casa, mi hija me pidió un mago para su fiesta de cumpleaños.

—Mami, pero yo no quiero que el mago haga desaparecer a nadie, lo que me gustaría es que haga aparecer al alguien. ¡Sería genial!
—Sí ¿no? pero tendría que traernos a alguien que queramos mucho. Ay, mejor contrato al mago para mí.
—¡Noooooo mamá! El mago es por mi santo, no por el tuyo, tienes que esperar tu turno!!!!!
—Sí hija, tienes razón, ahora no es el momento. Qué te parece si hacemos un acto de magia para irnos a dormir. Vamos a cerrar los ojos para entrar al mundo del mago Tabini. No, mejor no, basta de ser tabas —digo entre dientes—, mejor entramos al mundo de la maga ¡Mayini!
—¿Y que hay en ese mundo?
— El TLC de la Maya amor: Tiempo para ti y para mí, Libertad y mucha Creatividad.

7 comentarios:

Ama dijo...

jejeje
que lindo
me hizo recordar
como amaba yo de niña
a los magos...

Maldoror dijo...

y ser magos para ser madres o padres solteros o comprometidos, ser mago para ser padre (mi caso) y crear un mundo inventado con autos de carrera, superhéroes, papá noel...hasta que el viento de los años se lo lleve...pero podrá decir: qué mágico fue ser niño
dulce post el tuyo

Dylan Forrester dijo...

Así pues, en definitiva, prefiero el mundo de la Maga Mayini, jajaja...

Salud!

Anónimo dijo...

Hace mucho tiempo que no entraba a tu blog y para variar me encantó lo que encontré.... quería compartir una historia de magos que siempre me la contaba mi abuelita. Me decía, antes de dormirme,que existìa un mago buenisimo, espectacular y además muy bello. este mago tenía un acto que dejaba a todos sorprendidos. Su asistente, una chica hermosisima lo cubrìa con un manto y al decir unas palabras màgicas el mago desaparecía, se hacía humo delante de todo el público. luego la chica bella volvía a decir las palabras mágicas y reaparecía el mago con su sonrisa brillante. Una noche, ya hecho el acto de la desaparición, la chica olvidó las palabras mágicas (otros dicen, me contaba mi abuela, que la chica a propósito no quiso pronunciar las palabras), lo cierto es que el mago desapareció para siempre. El pobre mago se quedó esperando las palabras mágicas y nunca pudo volver a mostrar su sonrisa... siempre quise preguntarle a mi abuela qué pasó al final con el mago... pero la historia de mi abuela ya es otra historia

saludos
la chica alunada

Giselle Klatic dijo...

El asunto aquí es que el mago le hizo creer a la asistente que era espectacular, maravilloso, pero en realidad no lo era. Sencillamente era un aprendiz de mago. Si hubiera sido un mago de verdad se hubiera dado cuenta de que su asistente estaba poniendo a prueba su “mágica” relación para saber si era real, cambiando el orden del conjuro. Las palabras mágicas siempre estuvieron ahí pero el mago no las quiso escuchar, estaba demasiado asustado con el cambio. Por último, si hubiera sido un mago de verdad no se hubiera quedado esperando las palabras mágicas, él hubiera tenido el suficiente poder para reaparecer. ¿No te parece?

MAGO TABHINI dijo...

Gracias por tomarme como ejemplo de Mago en tu historia! Me encantó!
Me conoces o has visto alguna presentación mía?
Puedes conocerme más en:
www.tabhini.galeon.com
Saludosmágicos!
MAGO TABHINI

Giselle Klatic dijo...

Hola Tabhini!!!!!
Sí te conozco!!!! Has ido un par de veces a la oficina a hechizarnos con tus trucos.
Gracias por tu buena vibra!!!